•La contención emocional es todo lo que hagamos, los procedimientos y acercamientos, para que la persona que se siente preocupada o inquieta se tranquilice. Para que vuelva a adquirir la confianza en sí misma y que pueda ir retomando su capacidad de resolver la situación que enfrenta.

Hay algunos procedimientos para tranquilizar y estimular la confianza de la persona afectada por una crisis emocional, el apoyo primario para reestablecer su estabilidad, así como las alternativas para la expresión de sus sentimientos y las rutas para solucionar problemas.

Pero algo muy importante es que como docentes y directivos, no vamos a resolver los problemas que las personas de nuestra comunidad educativa tienen que resolver, sino que vamos a ayudar a que tomen su centro para que sean capaces de resolver lo que necesitan enfrentar.

Vamos a sostener a las personas a través del acompañamiento para que sean capaces de enfrentar esta crisis La contención. Esto puedo lograrse a través del establecimiento de límites claros y razonables. Asimismo, mediante la creación de espacios donde el joven pueda hablar en confianza de sus miedos, inseguridades, inquietudes, etc.

 • La comprensión. La habilidad para ponerse en sus zapatos, pero no por ello permitir conductas violentas, destructivas, etc. Cuando comprendemos al estudiante, podemos encontrar mejores herramientas para que éste se desarrolle y conquiste su autonomía sin ponerse en peligro o poner a otros en situaciones de peligro. Por ello es importante escuchar lo que los estudiantes piensan y sienten, sus retos, temores, preocupaciones, intereses, ideas, perspectivas.

 • El diálogo. Es la habilidad para plantear y expresar los pensamientos, emociones y sentimientos, y dar la oportunidad de que los estudiantes planteen y expresen los suyos, de tal forma que en este intercambio se dé un entendimiento. El diálogo da la oportunidad de que de aclarar, discrepar, dudar, preguntar, afirmar, etc.

• Enseñándole a asumir responsabilidades consigo mismos y con los otros. Algo que resulta fundamental para transitar a la vida adulta.

• Ejercicio de razonamiento y la toma de decisiones, haciéndoles preguntas que los estimulen a pensar lógicamente, a ser creativos, a tener iniciativa, y al mismo tiempo, haciéndolos partícipes de dinámicas donde se les invite a participar y tomar decisiones que tendrán un impacto.

Para que esta contención sea efectiva, se necesitan generar dinámicas, reglas y vínculos que le brinden sostén, pero que también le den la oportunidad de emanciparse. Debemos tener muy en claro que sostener y contener, no es lo mismo, que sobreproteger.

Muchas veces, hay una serie de mitos o ideas, que entorpecen nuestro acercamiento con los jóvenes. Una de éstas es pensar que el docente está para guiar y encaminar a sus estudiantes, debido a que el profesor sí sabe lo que es la vida y por tanto puede decir por dónde hay que transitar.

Esto genera un rechazo por parte de los jóvenes ya que en el proceso de construcción de su autonomía, una de las premisas es elaborar las propias pautas para vivir la vida. Cuando alguien les dice dónde está el camino y cómo hay que encontrarlo, inmediatamente esto genera resistencias pues va en contra del anhelo de descubrir por sí mismos el camino, además, de que esto entorpece su proceso de maduración.